Volvía de aquel lugar. Los recuerdos la abrumaban durante el regreso a casa. Era una de esas noches donde el protagonista era el viento frío, que helaba sus huesos.
Caminaba recta, decidida, pero cada unos cuantos pasos se giraba y la nostalgia la invadía.
El tiempo había pasado y recordaba aquellos días como si hubiese ocurrido esa semana.
Cuantas veces había deseado seguir caminando hacia el equivocado... Pero su miedo la retenía y la obligaba a volver sobre sus pasos.
Esta vez no fue diferente, aunque si que tuvo la esperanza cuando todavía él estaba a su lado. Le prometió que un día lograría seguir, agarrada de su mano y se marchó con otra.
Siempre volvía al mismo punto y se decía que podría, que llegaría el día en el que él y todo su maldito pasado quedarían atrás.
Claro que llegaría, y entonces, nunca miraría al pasado.
Caminaba recta, decidida, pero cada unos cuantos pasos se giraba y la nostalgia la invadía.
El tiempo había pasado y recordaba aquellos días como si hubiese ocurrido esa semana.
Cuantas veces había deseado seguir caminando hacia el equivocado... Pero su miedo la retenía y la obligaba a volver sobre sus pasos.
Esta vez no fue diferente, aunque si que tuvo la esperanza cuando todavía él estaba a su lado. Le prometió que un día lograría seguir, agarrada de su mano y se marchó con otra.
Siempre volvía al mismo punto y se decía que podría, que llegaría el día en el que él y todo su maldito pasado quedarían atrás.
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