jueves, 23 de junio de 2011

Siempre estaré lista para decir la verdad.

Siento que llega mi hora. Que todo mi cuerpo ahora está contagiado. Que es tarde.
Que no puedo hacer nada, que debo marchar.
Dejarlo todo atrás, despedirme.
Ahora es momento de hasta siempre, y de te echaré de menos. De nos veremos allí arriba, preciosa, y de no entiendo porque tienes que irte, no te lo mereces.
Es tiempo de miles de lágrimas al verme, de millones de abrazos que repartir al mundo. De cientos de cosas que contar, de no guardar secretos, ahora no. No puedo.
Esta vez me voy, y no puedo decir que volveré. Mi tiempo ha acabado en este lugar. En el mundo.
No voy a pedir ayuda, ya no hay solución a esto. Es algo que pasó, que tenía que pasar. Ya está.
Todo dicho. Bueno no, creo que algo se me olvida.
Perdona por no poder cumplir la promesa de nunca dejarte, de nunca irme.

No hay comentarios:

Publicar un comentario